Aparato digestivo de 0 a 12 meses

El aparato digestivo del bebé a las 6 semanas
Ecografía en Obstetricia y Ginecología. 2000. Desarrollo del vaciado gástrico en el feto humano. https://obgyn.onlinelibrary.wiley.com/doi/pdf/10.1046/j.1469-0705.2000.00162.x#:~:text=Fetal%20gastric%20peristalsis%20increased%20and,the%20intestine%20with%20gastric%20peristalsis [Consultado en mayo de 2022].
Ross MG y Nijland MJM. 1998. Development of ingestive behavior. American Journal of Physiology 274(4):R879-R893. https://journals.physiology.org/doi/full/10.1152/ajpregu.1998.274.4.R879 [Consultado en mayo de 2022].
El sistema digestivo del bebé madura
La alimentación es algo más que comer y beber: ayuda al bebé a desarrollar los músculos que utiliza para masticar, tragar y digerir los alimentos. El bebé pasará por muchas etapas de desarrollo de la alimentación, pero todas ellas son importantes para su crecimiento.
La alimentación de los bebés y niños pequeños es diferente a cada edad, pero es la ingesta de nutrientes lo que nos ayuda a crecer, desarrollarnos y prosperar. La mayoría de los bebés comienzan su vida con el pecho o el biberón, y poco a poco van introduciendo alimentos sólidos.
A lo largo de los primeros 18 meses de vida, el bebé irá alcanzando distintos hitos alimentarios. Estas etapas ayudan al bebé a introducirse poco a poco en los alimentos sólidos. Así, aunque al principio se alimenta de leche materna o artificial, lo normal es que entre los 4 y los 6 meses empiece a tomar purés y, poco después, pequeños sólidos.
Depende de la edad, pero siempre es mejor intentar mantener un horario regular de alimentación. A una edad muy temprana, el bebé se alimenta a menudo, en cantidades más pequeñas. Los recién nacidos suelen alimentarse cada 1-3 horas (8-12 veces al día), consumiendo aproximadamente 2-3 onzas de leche materna o de fórmula por toma. A medida que el bebé crece, puede pasar más tiempo entre tomas.
Cuándo mejora el sistema digestivo de los bebés
El aparato digestivo utiliza actividades mecánicas y químicas para descomponer los alimentos en sustancias absorbibles durante su recorrido por el sistema digestivo. La Tabla 1 ofrece una visión general de las funciones básicas de los órganos digestivos.
Visite este sitio web para obtener una visión general de la digestión de los alimentos en las distintas regiones del tubo digestivo. Observe el recorrido de los nutrientes no grasos desde el intestino delgado hasta su liberación como nutrientes al organismo.
El primero de estos procesos, la ingestión, se refiere a la entrada de los alimentos en el canal alimentario a través de la boca. Allí, los alimentos se mastican y se mezclan con la saliva, que contiene enzimas que empiezan a descomponer los hidratos de carbono de los alimentos, además de digerir algunos lípidos a través de la lipasa lingual. La masticación aumenta la superficie del alimento y permite que se produzca un bolo del tamaño adecuado.
Los alimentos salen de la boca cuando la lengua y los músculos faríngeos los impulsan hacia el esófago. Este acto de tragar, el último acto voluntario hasta la defecación, es un ejemplo de propulsión, que se refiere al movimiento de los alimentos a través del tubo digestivo. Incluye tanto el proceso voluntario de la deglución como el proceso involuntario del peristaltismo. El peristaltismo consiste en ondas secuenciales y alternas de contracción y relajación de los músculos lisos de la pared alimentaria, que actúan para impulsar los alimentos (Figura 1). Estas ondas también intervienen en la mezcla de los alimentos con los jugos digestivos. El peristaltismo es tan potente que los alimentos y líquidos que tragamos entran en el estómago aunque estemos de cabeza.
A qué edad: el aparato digestivo está completamente desarrollado
La conexión madre-hijo que se establece al alimentar al bebé (ya sea con pecho o biberón) no sólo ayuda a crear un vínculo, sino que también contribuye a su desarrollo cognitivo y emocional[1]. La alimentación también garantiza que el bebé obtenga la energía y los nutrientes que necesita.
Cada parte del tubo digestivo desempeña un papel en la salud y el crecimiento del bebé. A lo largo del proceso digestivo, el bebé absorbe pequeñas proteínas protectoras de la leche materna (denominadas anticuerpos) que combaten las bacterias y los virus nocivos, además de establecer bacterias intestinales sanas.
Durante los seis primeros meses del bebé, los expertos recomiendan la lactancia materna exclusiva para garantizar una nutrición, protección inmunitaria, crecimiento y desarrollo óptimos del lactante. Además de nutrientes importantes como proteínas, vitaminas y zinc, la leche materna contiene de forma natural anticuerpos y bacterias buenas que contribuyen al desarrollo de una flora digestiva sana y un sistema inmunitario más fuerte.
La digestión del bebé no sólo es importante para la correcta absorción de nutrientes, sino que también está directamente relacionada con la salud de nuestro sistema inmunitario. ¿Sabías que hasta el 80% de las células inmunitarias del cuerpo se encuentran en el tubo digestivo?[2] El tubo digestivo también contiene más de 500 tipos de bacterias,[3] muchas de las cuales contribuyen a la salud de nuestro sistema inmunitario. La leche materna contiene bacterias buenas llamadas probióticos, que favorecen el desarrollo de una flora intestinal sana y un sistema inmunitario fuerte[4]. Infórmate ahora sobre las fuentes de probióticos para tu bebé.